Al dividir el espacio de nombres por primera vez en zonas, revise los patrones de tráfico de la red actual o propuesta. Aunque el Sistema de nombres de dominio (DNS) está diseñado para reducir el tráfico de difusión entre subredes locales, crea cierto tráfico entre servidores y clientes que se debe revisar. Esto es especialmente cierto en los casos donde se usa DNS en redes enrutadas. Para revisar el tráfico DNS, puede usar las estadísticas del servidor DNS o los contadores de rendimiento de DNS que se suministran con el Monitor de sistema.
Además del enrutamiento del tráfico, tenga en cuenta el impacto de los siguientes tipos comunes de comunicación relacionados con DNS, especialmente cuando trabaje en vínculos de baja velocidad en una red de área extensa (WAN):
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El tráfico de servidor a servidor que se produce por las transferencias de zona con otros servidores DNS y por la interoperabilidad DNS con otros servidores (por ejemplo, cuando la búsqueda del Servicio de nombres Internet de Windows (WINS) está habilitada)
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El tráfico de cliente a servidor que se produce por las cargas de las consultas y las actualizaciones dinámicas que envían los equipos cliente DNS o servidores DHCP que ofrecen la actualización dinámica para clientes DNS de versiones anteriores que no admiten actualizaciones dinámicas
Para espacios de nombres plano de pequeño tamaño, puede usar la replicación completa de todas las zonas DNS para todos los servidores DNS de la red. Para espacios de nombres vertical de gran tamaño, esto no es posible ni se recomienda. En redes de mayor tamaño, suele ser necesario estudiar, comprobar, analizar y revisar los planes de zona basados en patrones de tráfico observados o estimados. Tras un cuidadoso análisis, puede dividir y delegar las zonas DNS en función de los requisitos para proporcionar servicios de nombres eficaces y tolerantes a errores para cada ubicación o sitio.
El servicio Servidor DNS admite transferencias de zona incrementales entre servidores que replican una zona estándar. Esta característica puede reducir las consideraciones de tráfico de replicación DNS y se debe revisar en el diseño de zonas.
Es posible que también convenga explorar el uso de servidores de sólo caché, que no hospedan zonas DNS. Los servidores de sólo caché son una buena opción en sitios remotos de pequeño tamaño que tienen un uso estable y mínimo del servicio de nombres DNS, pero están situados en una WAN donde la transferencia de una zona de gran tamaño a través de un vínculo más lento puede consumir gran cantidad de recursos.